Timoleón Castillo fue cobardemente asesinado por un desconocido en medio de un partido de una liga municipal del fútbol sala que se disputaba en la localidad de San Rafael de Cordero, en el estado venezolano de Táchira, informaron hoy las autoridades.
Según algunas fuentes locales, el agresor, al parecer, tuvo un intercambio verbal con Castillo después de que este presuntamente se negara a aceptar el ingreso de un jugador.
Durante la celebración de un gol, el agresor entró a la cancha y le propinó tres disparos en la cabeza a Castillo.
El árbitro falleció en el Hospital General de la población de Táriba, próxima a San Cristóbal, la capital de ese estado.
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